miércoles, 12 de noviembre de 2008

DOS PEQUEÑOS Y UNA GRAN ILUSION




El pasado sábado, los presentes en el nuevo polideportivo Samuel Ferrer, tuvimos la gran suerte de asistir al debut en competición oficial deportiva, de los pequeñarras Roberto “El Zidane del Villar” y Álvaro “El Beckenbauer del Santo Cristo” , sobrino y primo respectivamente de un servidor.



La verdad, es que fue un autentico espectáculo. Un puro divertimento ver a estos lebreles correteando el campo arriba y abajo, que parece que les han dao cuerda a los cabritos, no se cansan ni aunque aparezca “Falete” y se les suba a costalillos después de haberse comido un gorrino relleno de tordos.

Un poco de disciplina no viene mal....¡Señor, si señor!

Y es que juegan con una ilusión, una alegría y un entusiasmo, que los adultos, perdimos en la oscura noche de los tiempos. Una pena que la inocencia infinita de la infancia nos abandone tan pronto y tan cobardemente.

¿Quien dijo miedo?

En el batiburrillo de buenos sentimientos (alegría, esperanza, amor), que se podían leer en las caras de los padres, tíos y abuelos asistentes, se podía también atisbar una pizca de envidia, de ganas de saltar al campo, de menguar en cuerpo y alma, y bajar a jugar por pura y dura diversión, sin atender a ningún resultado; y porque no,camuflarse en cualquiera de los equipejos, olvidando aunque solo fuera por unos momentos, los problemillas que a todo adulto viviente nos angustian.



Lo que esta claro es que la practica del deporte, (y otros sanos divertimentos, ya sea música, pintura o similares...)cuanto antes mejor.
Supongo que desarrollar estas actividades (y menos, por si solas) no te convierte en un ser invulnerable ante la estupidez que provoca la adolescencia.
Cualquiera puede acabar tirado en un parque con una jeringuilla en la vena, pero que duda cabe, que estas aptitudes te otorgan como poco, una base y una capacidad de decisión que puede inclinar la balanza a tu favor a la hora de ahuyentar determinados fantasmas que nacen en esta época (tan determinante para nuestro futuro, en mi humilde opinión), y que cualesquiera padres, temen como al mismísimo Satanás.

Bueno hermosones, ya no os doy mas la brasa con mi verborrea. Os dejo alguna afotillo mas del evento y como ultimo apunte os digo, que si ya estáis hartos de apestosos y aburridos partidos entre mercenarios y muñecas de discoteca, pasaros un día a ver un partido de la liga infantil y animar a los chicotillos. Ellos disfrutarán, y vosotros todavía más.

Mi número favorito. Un gran detalle hermano.



Jaíto Junior fue un muro infranqueable



Míalo, que majo el somarraco




PD: Con todo mi cariño para Roberto y Lidia que han cumplido un año más esta semana.

Y por supuesto no os perdais el VIDEOOOOOOOOOOOOOO: